LXV LEGISLATURA
Cumplimos
INTERVENCIÓN DE LA DIPUTADA WENDY BRICEÑO ZULOAGA, DEL GRUPO PARLAMENTARIO DE MORENA, EN EL MARCO DEL HOMENAJE LUCTUOSO A MARÍA ELENA CHAPA HERNÁNDEZ.
11 agosto, 2021 - Prensa
DIPUTADA WENDY BRICEÑO ZULOAGA (WBZ). Con el permiso de la presidenta.
Buenas tardes, compañeras legisladoras, compañeros legisladores. Saludo también a quienes nos siguen por las redes sociales del Congreso de la Unión.
A nombre del grupo parlamentario de Morena, me permito honrar con un mensaje la memoria de la maestra María Elena Chapa Hernández, mujer excepcional y de quien no podemos sino estar agradecidas por su vocación democrática a favor de las mujeres mexicanas.
Figura clave para entender los feminismos en México, promovió otras formas de entender la política, esa que poco narran los libros oficiales y que ya es tiempo de que se haga visible; esa que se escribe de la mano de las mujeres, y que tiene amplias repercusiones democráticas, aunque ha sido fundamentalmente un camino cuesta arriba, regateado.
Senadora, diputada, ganó y perdió elecciones al buscar espacios de representación popular y con su conocimiento adquirido, observó de cerca las limitaciones estructurales para la participación política de las mujeres, y como parte de ello, las diversas violencias que vivimos.
Y pensó con otras cómo hacer y qué decir a esos señores que no iban a dejar sus privilegios de forma sencilla. Y cuando fue necesario, encaminó los pasos de sentencias emblemáticas en los derechos político-electorales de las mujeres. Y ganó y ganamos todas. Y lo hizo pensando de forma estratégica, poniendo todo su empeño en la tarea histórica que se había formulado: la paridad.
En este homenaje, escuchamos distintos aspectos de su vida y recordamos a la maestra María Elena Chapa precisamente al reflexionar sobre las revoluciones de pensamiento y acción, que hoy nos impulsan a participar en el espacio político y la esfera pública para resolver los problemas que aquejan al país, ahí está la esencia de María Elena Chapa.
Ser férrea defensora del Instituto Estatal de las Mujeres en su natal Nuevo León, le valió numerosos reconocimientos y distinciones, pues sabemos que el poder público ejercido desde lo local impacta directamente en la población.
En nuestros días, aún falta reconocer en algunas entidades el poder e influencia que emana desde el movimiento feminista, la lucha y causas de las mujeres para la transformación social, misma que se da en ámbitos distintos a la vez: el activismo, las calles, la política, por mencionar algunos, y se conectan para nuestro avance, pero no sin resistencias que experimentamos en cada momento por parte del machismo y del patriarcado.
Porque las luchas de las feministas son, además de válidas, urgentes y necesarias. Y ante ello no podemos callar y solapar atropellos. Sea también este homenaje a la memoria de una mujer que abrió brechas y defendía libertades, espacio para visibilizar otras luchas y levantar la voz, por las activistas en el Estado de México, ciudadanas de diversas edades quienes se manifestaron el día de ayer por la interrupción legal del embarazo en la entidad, y ante lo cual el Congreso local no ha hecho sino reprimir el legítimo derecho a la protesta.
Demandamos al Legislativo mexiquense hacer eco de las demandas de las mujeres y hacer lo correspondiente para dar la discusión del dictamen conforme a la ley.
Recordar la voz insumisa y atípica de María Elena Chapa, como ella misma se definía, nos recuerda que no nos levantaremos de la mesa, hasta que se logren los objetivos. Y para ello, requerimos estar en la mesa. Y requerimos además de ser votadas, tener representación en la toma de decisiones.
La paridad es un principio constitucional y está presente también en más de una centena de leyes secundarias, cuyas iniciativas se han presentado en esta Cámara y en el Senado de la República. Porque la paridad es un derecho y, como tal, exigimos y exigiremos estar en la siguiente Legislatura en los espacios que nos corresponden. La mitad. Ni más, ni menos.
Lo decía María Elena Chapa en 2001: “Alentar a las iguales a las oportunidades políticas cuesta. Pagas el precio de la osadía. La larga lista de requisitos que unos piden para las otras que aspiran no se llena de la misma manera. Es que no hay mujeres. Así dicen…”
Esperemos que esta insurrección feminista avance y sea fructífera, que no se pague ningún precio más, porque si a alguien se nos han regateado derechos ha sido a las mujeres.
La paridad pues como premisa de vida para una sociedad más justa. Atesorar las enseñanzas de la maestra Chapa, para apropiarnos de nuestra historia. Y la historia de México no puede prescindir de poco más de la mitad de su población: las mujeres. Y la LXV Legislatura, que en breve comenzará, tendrá también que ser consecuente con ello.
Nunca más un México sin nosotras. Por el legado de María Elena Chapa y de todas aquellas que pensaron en que todas construimos, y por tanto nuestras voces cuentan.
Que desde ésta la Casa del Pueblo, se abracen y se comprometan los principios de democracia y justicia por los que siempre luchó María Elena Chapa.
Escuchándolas a todas y con este homenaje, corroboro una vez más lo que han dicho las feministas, lo personal, esa cercanía, ese conocimiento, esa sororidad, lo personal es político.
Cierro, desde aquí expreso mi más sentido pésame a su familia, amistades, aliadas, compañeras, compañeros de partido. Les abrazo. Hasta siempre, maestra María Elena Chapa.
Es cuanto, presidenta. Muchas gracias.
-0o0-