DIPUTADA MARÍA DEL CARMEN BAUTISTA PELÁEZ (MCBP). Buenas tardes a los medios de comunicación, a las personas que hoy nos acompañan.

Tenemos la presencia de una persona excepcional la ciudadana María Elena Ríos, de profesión saxofonista, pero es lamentable que a pesar que han transcurrido tres años de su intento de feminicidio, realizado cobardemente por Juan Vera Carrizal, ex diputado del PRI, no se haya actuado conforme a derecho y todavía peor, saber que esta persona tan detestable podría quedar en libertad gracias al tráfico de influencias que ha realizado mediante el otorgamiento de dádivas.

Antes de ceder la palabra a María Elena para que exponga su caso, quiero recordarle a ella y a todas las mujeres que han subido violencia, que donde existe una mujer violentada, estaré desde mi posición para defender sus derechos, nuestros derechos. Todas juntas, muchas gracias.

MARÍA ELENA RÍOS (MER). Buenas tardes tengan todos ustedes. Gracias, medios de comunicación, porque si no fuera por ustedes el día de hoy no estuviera aquí, viva, contando las realidades que existen allá afuera para las mujeres en México. Gracias, diputada María del Carmen, diputada Aleida, diputada María Eugenia; senadora Verónica y senador Elí.

El día de hoy me gustaría platicarles muchas cosas, pero creo que voy a comenzar por lo indispensable y lo fundamental, pero sobre todo lo urgente.

El motivo de que el día de hoy tome tribuna es porque desafortunadamente el tráfico de influencias, la corrupción que existe en el estado de Oaxaca es demasiada, es un mar y se debe denunciar.

He pasado por tantas situaciones que no vulneran solamente mi vida, sino también la de mi familia, esto pues con la finalidad de callarme y, si es posible, de matar la verdad.

El día de ayer tuve una reunión con el fiscal general del estado de Oaxaca, el señor Arturo Peimbert Calvo, que necesitaba verme con mucha urgencia. Desafortunadamente no da la cara para acompañarme, aun sabiendo que le corresponde porque es el fiscal de Oaxaca, pero el motivo de la reunión fue para comentarme que a mí agresor, Juan Antonio Vera Carrizal, sí, ese ex diputado del PRI, que se encuentra solamente en prisión preventiva porque la sentencia no ha llegado, ya que el exceso de corrupción y tráfico de influencias no ha permitido que llegue siquiera a la etapa intermedia, busca salir el día de hoy o mañana de la cárcel.

Esto pues la semana pasada, junto con su asesoría legal que no se cansa de revictimizarme, y junto con su familia, emitieron y solicitaron un amparo con la finalidad de que el señor lleve el proceso en prisión domiciliaria, cosa que no debe de suceder porque es un intento de feminicidio.

Esto también con la finalidad de que la agresión ya no sea feminicidio sino simple lesiones y, sí, son lesiones que me marcaron la vida, son lesiones que jamás se me van a quitar y cada día que me levanto y me miro al espejo me recuerdo el motivo del por qué sigo viva, y el motivo del por qué sigo viva no solamente es por mí vida, es por la vida de cientos de mujeres que se encuentran allá afuera viviendo situaciones vulnerables, porque no cuentan con el privilegio de tener eco en los medios de comunicación.

Hago una denuncia a los siguientes magistrados, quienes fueron¿ sobornados por la familia de Juan Antonio Vera Carrizal y esto que estoy diciendo lo digo con toda la realidad y la certeza, ya que el día de ayer el señor fiscal, Arturo Peimbert, me mostró y repitió la investigación que él hizo en dónde recabó audios de la semana pasada, en donde la señora Guadalupe Vera Hernández, hija de Juan Antonio Vera Carrizal, ex diputado del PRI, le hace una llamada telefónica en dónde le dice que el pago ya quedó.

Y el pago ya quedó, o sea el soborno para los siguientes magistrados, y escúchenlo bien, magistrados, porque sé que me están escuchando: Arturo Lázaro León de la Vega, a ver si no le da vergüenza mirar a los ojos a su familia cuando llegue su casa; a la magistrada Elizabeth Roxana López Luna, a ver si también no le da vergüenza que hipócritamente defiende a las mujeres; y también al magistrado Ángel Alejo Torres, ellos recibieron un soborno bastante fuerte por parte de Juan Antonio Vera Carrizal y su familia para que resuelvan el amparo a favor entre el día de hoy y mañana.

¿Por qué me refiero entre el día de hoy y mañana? Porque hasta la fecha me tuve que enterar por mi cuenta que existía esa intervención de amparo, porque a mí no me notifican nada, por eso es que no tengo la certeza si el término es el día de hoy o es el día de mañana.

Esto pues se debe de
denunciar, señoras y señores.

El hecho de que me encuentre el día de hoy hablando con una voz sólida, porque mucho me ha costado trabajo venir hablarles sin una gorra y cubrirme lo menos que puedo, porque estoy adquiriendo confianza, porque evidentemente me tengo que recuperar, porque evidentemente después de tres años no voy a estar postrada en una cama, tengo que recuperarme y no solamente como víctima que es un término que me molesta mucho utilizar, sino porque soy una sobreviniente, soy una sobreviviente de un intento de feminicidio perpetrado con ácido en mi contra, cobardemente, premeditado.

Estoy aquí y tengo todo el derecho como sobreviviente y como ustedes, sobrevivientes, que me están escuchando y víctimas de violencia feminicida y violencia machista que es algo que sobro en este país.

Todas, recuérdenlo bien, todas tenemos el derecho de volver a hacer felices, de buscar reconstruir nuestra vida, de salir a bailar con nuestros amigos, a comer con nuestras amistades, de reír, de seguirnos preparando y esto jamás, jamás va a eximir a esos feminicidios, a esos criminales de todo el daño que nos hicieron.

Yo quiero hacer un exhorto y una petición. Ya la hice en la mañana al Presidente de la República, al señor Andrés Manuel López Obrador; a quien le dejé un documento, una copia de este documento y me lo recibieron en atención ciudadana, porque él no me pudo recibir, entiendo que está muy ocupado, pero sé que ya lo leyó, para que me ayude a intervenir.

Lo que está sucediendo el día de hoy, no solamente le sucede a María Elena, le está sucediendo la misma historia a decenas de mujeres, hoy, en que tratan de dejar en libertad al agresor. Porque desafortunadamente este problema de misoginia y de machismo es un problema sistemático. ¿Y por qué sistemático? Porque se encuentran todas las estructuras que componen este país.

Hago un llamado también al fiscal general de la República, el señor Alejandro Gertz Manero, y también al presidente, al ministro presidente Arturo Saldívar.

En esta lucha no he estado sola, he estado también, gracias a ustedes, gracias a las personas que me han estado escuchando, a mi familia y sobre todo también a mi abogada, Diana Cristal González Obregón, de las mujeres abogadas en México que no se corrompen. Y es un ejemplo a seguir para las mujeres como yo, tengamos esperanza de encontrar justicia en este país.

Algo que me ha llamado mucho la atención a lo largo de este proceso, es la constante revictimización, no solamente de mi agresor a través de su familia y a través de sus abogados, como usted señor Carlos Prat, que no se cansa de litigar en Facebook, pero que no se fija la manera de cómo le contesta al juez, la mala redacción de sus documentos.

Ya basta de que me estén intimidando, yo no voy a permitir nunca más que ningún criminal me vuelva a intimidar, que ningún criminal me vuelva a atemorizar. Al igual que yo, todas las mujeres estamos hartas de esta situación.

¡Basta ya de tanto feminicidio, basta ya de tanta violencia! Porque la violencia, como continúo diciendo este tema, no solamente viene de ellos; desafortunadamente también viene de las instituciones y un caso reciente que les comparto abiertamente y que también denuncio abiertamente es a Gobernación por parte del mecanismo de Protección Federal para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas, mismos, quienes ustedes saben y les consta que ustedes también están desprotegidos.

¿Por qué no quieren gastar aun sabiendo que hay bastante presupuesto para ello? ¿Qué es lo que me pasó? Que como María Elena tocó con Maldita Vecindad en el Vive Latino, pues ya no tiene nada, ya no corre riesgo. No tiene que ver una cosa con la otra. No tiene que ver con el hecho de que trate de recuperar mi vida, de que trate de sentirme viva. No tiene que ver para nada con la injusticia que se sigue cometiendo.

El pasado 30 de marzo, tuve mi primera Junta de Gobierno; anteriormente tuve una evaluación de riesgo en donde se llegó a Junta de Gobierno a decir que yo no tengo ningún riesgo porque no me han agredido físicamente.

Entonces, mi pregunta acá directamente es para el señor Alejandro Encinas, quien no me ha podido responder una llamada. Señor, Alejandro Encinas, ¿es necesario que me maten como a mis amigas, como a mis hermanas, por el simple hecho de ser mujer? ¿Es necesario que me maten como a mis compañeros periodistas para de verdad digan que necesito una medida de protección?

Si ya bastante ha sido ineficiente con mi familia, a quien no quiere proteger y que se ha denunciado mediante fichas informativas que han sido agredidos también físicamente, expuestos públicamente, por Juan Antonio Vera Carrizal y la familia agresora. Ya basta, señor Alejandro Encinas.

Tuve que, a raíz de esa pésima resolución en donde las medidas... Señor Alejandro Encinas, usted se pronunció diciendo que rechazaban, categóricamente, que me hayan quitado las medidas y más se haya sido por presupuesto.

Lo invito a que lea las entrevistas en donde yo hablo o en donde yo escribo. En ningún momento dije que me quitó las medidas, siempre manifesté que las medidas me las redujeron a Oaxaca, aun sabiendo que tengo un desplazamiento forzado y una calidad de víctima en la Ciudad de México junto con mi familia.

Aun sabiendo que yo no estoy en la Ciudad de México por gusto, ni por vanidad porque es tan doloroso tener que atravesar también por un proceso médico en donde no sé cuándo se van a terminar las intervenciones quirúrgicas, los tratamientos dermatológicos, en donde me tienen que dormir porque el dolor es insoportable, señor Alejandro Encinas.

Aquí yo no estoy por gusto, porque aquí está mi asesora legal, aquí me protege la Comisión de Víctimas de la Ciudad de México. Cómo es posible que aún sabiendo que existe un quinto feminicida libre, y esto hago referencia a tu hijo, Juan Antonio Vera Carrizal, tu hijo del mismo nombre que desafortunadamente se ha confundido y hago la aclaración, se llama del mismo nombre, Juan Antonio Vera Hernández y para el colmo se parece a ti, por eso ha habido confusión, lo he visto en la calle, lo he visto en la carretera y goza de total impunidad.

Aún sabiendo esto, el mecanismo de protección federal se atreve a decir que yo no corro riesgo; aún sabiendo que no solamente me quiso matar con ácido, sino que en 2020 le fueron congelados 503 millones de pesos por lavado de dinero y huachicol; aún sabiendo que el año pasado, en julio, recurrí a la Secretaría de Protección Ciudadana, con el señor Ricardo, ¿cómo se llama el subsecretario? Perdón, Ricardo Mejía.

Fui a ver al señor Ricardo Mejía para entregarle la dirección en donde se encontraba el junior, Juan Antonio Vera Hernández y ¿qué es lo que hizo? filtrar información, porque no pasaron ni tres horas cuando Carlos Jaime Pratt, el abogado de Juan Antonio Vera Carrizal, anunció, burlándose en sus redes sociales, que como ya había sido procurador de Hidalgo y no sé qué otro estado, tenía los suficientes contactos; y burlándose dijo, contactos con que van a catear la casa de Juan Antonio Vera Carrizal, pues ya veremos.

Hasta esos alcances tiene mi agresor, porque no solamente bastó con que le congelaran una cuenta de 503 millones de pesos, sino que antes de que Santiago Nieto abandonara su cargo le pedí, le pedí información sobre ese dinero porque todas las víctimas tenemos derecho a una reparación del daño.

¿Y qué es lo que me dijeron? Tristemente, ese dinero desapareció. Esos alcances tiene Juan Antonio Vera Carrizal.

En un principio, cuando me quisieron matar, le di el beneficio de la duda al señor gobernador, Alejandro Murat Hinojosa, y al entonces exfiscal Rubén Vasconcelos Méndez, cómplice, porque eso eres, Rubén, un cómplice.

¿Y qué es lo que me dijeron? Que iban a colaborar y que el proceso iba a ser llevado de la mejor manera y prontitud posible.

Han pasado tres años, tres años y no puedo llegar a la etapa intermedia por el exceso de corrupción y tráfico de influencias.

Este día, no solamente es para denunciar lo que le está sucediendo a María Elena Ríos Ortiz. El pasado, 25 de mayo, volvieron a agredir a otra mujer en Puebla, en el edificio del CIF en la Angelópolis.

¿Y por qué está sucediendo esto? ¿Alguien se ha preguntado por qué en 2021 los ataques con ácido se incrementaron un 100 por ciento? Sí, se incrementaron gracias a la impunidad que nos brinda el Estado a las mujeres porque el Estado es un Estado misógino en donde, desafortunadamente, aunque en la mayoría hay paridad, no todas nos atrevemos a revelarnos y con eso me refiero, no a ustedes, pero sí a otras servidoras que lo único que vienen a hacer a estos espacios es a ser subordinadas, a obedecer órdenes de los machos misóginos que siguen imperando como dinosaurios en todos estos espacios.

Entonces, aquí yo hago la invitación, la atenta invitación a todas las mujeres: atrevámonos a revelarnos, somos tan pero tan poderosas que nos quieren ver desunidas. Muchas gracias.

Si tienen alguna
pregunta con mucho gusto se las puedo responder

PREGUNTA (P). Buenas tardes, justamente ahora que mencionabas también este caso de Puebla que ha despertado gran preocupación, sobre todo en las mujeres, y también tu caso, ¿hay algo que se esté haciendo y esa pregunta sí va para las diputadas, para ver cómo se puede, pues digámoslo así, no sé si hay alguna legislación o alguna propuesta que tengan pensado a raíz de todos estos ataques que ya se hacen cada vez más sistemáticos y poder apoyar a las mujeres y las víctimas que sufren los ataques de ácido? Gracias.

MER. ¿Me permites
finalizar?

Si me permiten finalizar los medios de comunicación me gustaría recalcar esto: poner atención a la resolución que se pueda emitir por parte del Tribunal del Estado de Oaxaca con los magistrados ya mencionados.

Por la naturaleza de un intento de feminicidio con ácido, Juan Antonio Vera Carrizal no puede quedar siquiera pagando su cárcel en su casa. Sería una burla y un fracaso rotundo no solamente para las mujeres sino para las mujeres que día a día se han empeñado en sacar a más mujeres adelante mediante protocolos de justicia. Gracias.

Juan Antonio Vera
Carrizal, no vas a salir de la cárcel. Gracias.

DIPUTADA ALEIDA ALAVEZ RUIZ (AAR). Solamente finalizar, haciendo este llamado que comenta Elena sobre la actuación de los magistrados en Oaxaca.

Si es de comprobarse el que están siendo sobornados para fallar en un dictamen que permita la liberación de este agresor, lo condenamos rotundamente y exigimos al Gobierno del Estado y al Poder Judicial del Estado de Oaxaca, tomen cartas en el asunto.

Esto no puede quedar así. No podemos permitir que agresores, violentadores, estén buscando la forma de hacerse de cómplices, de sobornar funcionarios para lograr fallos a su favor.

Tiene que haber castigo ejemplar para que estas conductas se, completamente, eliminen de la sociedad. Ya no más agresiones a las mujeres, ni siquiera verbales.

Eso es lo que queremos empujar desde las diferentes Legislaturas, tanto en el ámbito local como nacional y, como lo dice la senadora, hay muchos delitos que son del orden común, por eso es que necesitamos la homologación de la tipificación en los códigos penales en los estados y eso, a su vez, hacerlo valer en el Poder Judicial.

Que no se salgan con la suya los que pretenden cubrirse en este machismo que prepondera en la sociedad cuando no alzamos la voz.

Entonces queremos alzarla y queremos poner todo el énfasis a que no haya esta actuación que permita la liberación de este criminal. Gracias.

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