- Dijo que en situaciones de emergencia económica, el endeudamiento es una opción que utilizan casi todos los países; sin embargo, no todos tienen la misma capacidad para contratar deuda en condiciones aceptables y sostenibles

La vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna Luna, aseguró que ante la emergencia sanitaria por el coronavirus, el Presidente Andrés Manuel López Obrador no descarta recurrir a la deuda pública pero como último recurso, ya que primero deben agotarse otras posibilidades, cuantificar las acciones que aún falta realizar e identificar varias fuentes de financiamiento disponibles.
Dijo que en situaciones de emergencia económica, el endeudamiento es una opción que utilizan casi todos los países; sin embargo, no todos tienen la misma capacidad para contratar deuda en condiciones aceptables y sostenibles, ya que implica necesariamente un incremento futuro del costo financiero.
“La capacidad de endeudamiento de un país está determinada por múltiples factores y no necesariamente sólo por el tamaño de la deuda”, explicó.
Recordó que durante los primeros años de la administración pasada, la deuda pública se incrementó de manera importante al pasar de 33.8% del PIB en 2012 al 48.2% en 2016. A partir de 2017, agregó, se modificó la política de endeudamiento y se logró disminuir a 46.1%, “durante el primer año de la actual administración continuó la política de no incrementar la deuda y se redujo a 45.5%”.
Padierna Luna señaló que el incremento de la deuda trajo como consecuencia que su costo financiero pasara de 1.9 a 2.7% del PIB entre 2012 y 2019 y se tuviera que destinar en 2019 el 12.4% de los ingresos presupuestales, más del 8.7% que se destinaron en 2012.
Expuso que en el paquete fiscal de 2020 se consideró un escenario de disminución paulatina de la deuda hasta llegar al 43.9% en 2024, con lo que se reduciría su costo a 2.6% del PIB y al 12.0% de los ingresos.
“La emergencia sanitaria que inició en febrero ya ha tenido un impacto en la economía y por supuesto en las finanzas públicas. Los nuevos pronósticos estiman una caída de los ingresos y para atender la emergencia, el Gobierno federal requerirá de recursos adicionales a los aprobados y se tendrá que recurrir a fuentes de financiamiento complementarias”, detalló.
Indicó que en los Pre-Criterios Generales de Política Económica 2021 que presentó la SHCP este mes de abril, para 2020 se estima una reducción de los ingresos de 586 mil millones de pesos (mmp).
La legisladora federal refirió que para compensar la caída de los ingresos se ha propuesto utilizar 289 mmp de recursos disponibles en fideicomisos públicos, principalmente del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestales (FEIP) y las coberturas petroleras y 259 mmp de nuevos endeudamientos, lo que incrementará la deuda neta del 45.8% del PIB aprobado a 52.5%.
“El costo de la emergencia, que aunque no está cuantificado, seguramente implicará gastos adicionales derivados de las medidas que ya anunció el Gobierno federal, dentro de las que destacan mayores recursos para el sector salud, el reforzamiento de los programas sociales para apoyar a la población más vulnerable y el financiamiento de 2 millones de créditos a pequeñas empresas y personas”, apuntó.
Sostuvo que para ello, se han anunciado algunas acciones adicionales para enfrentar la problemática como: intensificar las medidas de austeridad del gasto público, utilizar mayores recursos de los fideicomisos y de los activos financieros disponibles para su venta.

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