DIPUTADA GUADALUPE RAMOS SOTELO (GRS). Con el permiso de la Presidencia. Compañeras y compañeros legisladores, en esta legislatura unimos esfuerzos para reformar el marco normativo mexicano, con la finalidad de acabar con la violencia que sufren las mujeres en México.

El presente dictamen guarda sintonía con este actuar, toda vez que propone que el delito de violencia familiar sea perseguido de oficio. El delito de violencia familiar, además de tener gran incidencia en el territorio nacional, es cometido mayormente en contra de mujeres y niñas.

Las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública 2019, registraron más de 238 mil carpetas de investigación relacionadas al delito de violencia familiar. Esta conducta delictiva no se limita a una sola ejecución. Es decir, llega a ser repetida en el hogar, lo que ocasiona daños irreparables dentro del núcleo familiar, tanto física como emocionalmente.

Muchas mujeres mexicanas se encuentran expuestas a la violencia familiar y se abstienen de denunciarla, principalmente debido al miedo de las mujeres a ser violentadas con mayor intensidad, o inclusive a ser asesinadas por sus agresores.

Las conductas de dominio, la agresión física, psicológica, patrimonial o económica, que trasgreden el derecho humano de las mexicanas a la dignidad y al libre desarrollo de la personalidad son parte de esa violencia familiar.

Cuando es la propia víctima quien solicita que se persiga el delito contra ella, se genera como consecuencia la falta y escenario de impunidad.

La reforma que se presenta es necesaria e impostergable para establecer que este delito se persiga de oficio y permita que cualquier persona que tenga conocimiento de un hecho violento en un núcleo familiar pueda denunciarlo ante las autoridades.

Por lo tanto, las autoridades tendrán la oportunidad de perseguir el delito, sin la necesidad de que medie la denuncia de la víctima, se castigue conforme a la Ley Penal a los agresores y se garantice la reparación del daño en favor de la víctima.

Es importante resaltar que el dictamen va de acuerdo con las nuevas realidades generadas por el Covid-19. En el primer cuatrimestre del año pasado se registraron 68 mil casos de violencia familiar, lo cual representó un aumento del 10 por ciento, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esta situación se ha ido agravando a lo largo del confinamiento, por lo que estamos obligados, como ente legislativo y reconstructor del marco legal del país a tomar cartas en el asunto.

Esta reforma suma los compromisos asumidos por México en la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer. Legisladoras y legisladores, los invito a acompañar este dictamen, los invito a seguir realizando acciones tendientes a erradicar la violencia en contra de las mujeres. Los exhorto a reconstruir el tejido social y, primordialmente, a proteger la dignidad y la integridad de las mujeres y las niñas mexicanas. No más escenarios hostiles dirigidos a violentar a la mujer en el hogar. Así que, por ella, por mí y por todas. Muchas gracias.

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