DIPUTADO MARIO DELGADO CARRILLO (MDC). Muchas gracias, buenas tardes a todos y a todas. Quiero empezar agradeciendo al senador Ricardo Monreal por esta invitación; a la presidenta del Senado, Mónica Fernández; a mi amigo, Julio Menchaca.

Saludo con mucho respeto al ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Saldívar; a nuestra secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; al Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero; al Consejero de la Presidencia, jurídico, Julio Scherer; a Santiago Nieto; a Rafael Guerra; al gobernador de Oaxaca, en fin, a esta amplia convocatoria que el día de hoy está aquí, todos ustedes.

Es un foro, sin duda, es trascendental para la discusión pública y plural de uno de los grandes temas pendientes de la agenda nacional como ya se ha dicho aquí.

Celebro la presencia de representantes de todos los niveles de gobierno, también de quienes asisten a este foro y desempeñan responsabilidades para administrar, procurar e impartir justicia en los tribunales, las procuradurías y las fiscalías a lo largo y ancho del país.

Quiero reconocer la convocatoria que el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado ha extendido a diversos actores para que hoy contemos con la participación de representantes del Gobierno federal, gobiernos locales, del gobernador Murat; su presencia en este foro es una muestra del interés de todos los presentes para avanzar en una reforma para un auténtico sistema de justicia.

Antes de referirme al tema que nos ocupa, quisiera señalar algunas cuestiones que desde mi punto de vista marcan un antes y un después sobre la forma en que en la Cuarta Transformación se enfrentan los ancestrales problemas de justicia de nuestro país.

En primer lugar, ha quedado claro que toda la acción de Gobierno en la Cuarta Transformación, busca cumplir con el principio de justicia de que a cada persona se le respete el máximo grado de libertad y que, ante las desigualdades sociales imperantes, tenemos que preocuparnos primeramente, por sacar del atraso social y económico a los más pobres y desfavorecidos.

En segundo lugar, como lo ha señalado insistentemente el Presidente de la República, no habrá una verdadera transformación, y por tanto justicia, mientras no desatoremos este perverso predominio del poder económico sobre el poder político, nudo característico del régimen neoliberal.

En tercer lugar, que todo esfuerzo individual y colectivo, así como público y privado para lograr una sociedad justa y armónica, pasa fundamentalmente por que se combata desde arriba y en serio a la corrupción, se acabe con la impunidad y se termine la práctica de la simulación.

Y en cuarto lugar, que el modelo de justicia de la Cuarta Transformación, es un modelo de justicia para todos, muy diferente al modelo de justicia del régimen anterior que fue de beneficio para unos cuantos, para los que desde el Congreso y de las altas esferas impusieron una agenda depredadora, rapaz y extractiva que privatizó los beneficios y socializó las pérdidas.

¿Cómo se ve o algunos aspectos del sistema de justicia a partir de la pandemia del Covid-19? Aquí aventuro algunas respuestas.

En primer lugar, es obvio que la pandemia ha sido un acicate para que todos nos atrevamos a pensar diferente y a imaginar un sistema de justicia que se modernice con ayuda de la tecnología. De hecho, ya lo están haciendo, y hay que reconocerlo, en diferentes grados a nivel federal y local.

En el segundo lugar, que estaremos mejor preparados para el futuro porque ya contamos con un sistema de justicia que está avanzando y transformándose para evitar que se vuelva a dar la suspensión de actividades, que desafortunadamente tuvieron los tribunales de justicia en todo el país.

Por eso celebro que los tribunales especializados y también la Suprema Corte de Justicia ya estén trabajando de manera remota para que la justicia no se detenga.

En tercer lugar, me preocupa que se avance, sin antes resolver el acceso de la ciudadanía a internet, por que la justicia sea universalmente digital. Hay que recordar que, de acuerdo con las cifras del Inegi en 2019, en México solamente uno de cada dos hogares tiene acceso a conexión a internet.

En cuarto lugar pienso que hay que extender la justicia digital a todas las materias para que no sólo las disputas familiares, civiles, administrativas, sino toda aquella relevante para la población, y requiera de un juez, se tramite ágilmente en línea.

De hecho, el pasado 12 de agosto la Comisión Permanente pidió a los tribunales del país que la impartición de justicia involucre el mayor número de materias y procesos posibles.

En quinto lugar creo que debemos trabajar en una perspectiva que haga de la justicia un asunto accesible y abierto, en especial que caracterice sus procesos del modo siguiente:

Que sean universales, para que quien tenga que presentar una controversia pueda estar seguro de que se le va a atender en igualdad de condiciones sin importar su condición económica, la lengua que hable y su conocimiento de las leyes.

Inclusivos, es decir, que la justicia esté verdaderamente al alcance de toda la población y no sólo de quienes afortunadamente tienen los medios para poder pagar un abogado.

Que sean idóneos, esto es que sus procedimientos sean simplificados, ágiles y sencillos, pero al mismo tiempo seguros y protegidos, y también que sean efectivos. Esto es que cuando se amerite una sanción, ésta sea proporcional al daño social y que llegue en un momento oportuno.

En sexto lugar, esto lo quiero subrayar especialmente, creo que debemos imaginar cómo vamos a atender lo que verdaderamente le importa a la gente en materia de justicia. Aquello que decía el jurista Ulpiano que la justicia es dar a cada quien lo suyo.

¿Cómo entienden los mexicanos la justicia? Hay una encuesta que hizo la UNAM en el 2015, “Los mexicanos vistos por sí mismos”, y cuando se le preguntó a la población qué significa la justicia, 33 de cada 100 dijeron que implica que las leyes sean parejas para todos, 27 de cada 100 dijeron que consiste en que se castigue a los delincuentes, 20 de cada 100 señalaron que se resume en que el gobierno cumpla lo que promete, y 16 de cada 100 dijeron que significa que se respete a las personas y que el pueblo tenga mejores condiciones de vida.

Me parece que esas respuestas deben corresponder a una agenda de justicia que verdaderamente importe a la gente.

Para finalizar quiero decirles que en esta Legislatura hemos dado algunos pasos significativos en la materia: la reforma para la democracia y la transparencia sindical, la reforma al artículo 19 de la Constitución, el castigo de la violencia política de género y la reciente reforma para que las sentencias sean públicas son algunos botones de muestra.

Aunque también debemos reconocer que nos queda mucho por hacer en la realización de una agenda para la justicia auténtica y para todos, que se coloque armónicamente entre los dos extremos indeseables: el de una justicia para unos cuantos y el de una justicia que se toma por propia mano.

Dicha agenda debería incluir los siguientes ejes: justicia para acabar con los privilegios y por ello eliminar el fuero del Presidente de la República, porque la ley debe ser pareja para todos, es una reforma que vamos a abordar en septiembre en la Cámara de Diputados; justicia para que se castigue a los delincuentes, para que estén en prisión quienes más daño causan a la sociedad, prisión preventiva oficiosa; justicia para que la medianía del sector público y no las altas remuneraciones sean la justa retribución cuando se trabaja para el pueblo; justicia para acabar con los fraudes electorales, con el abuso desde el poder, la compra y coacción de votos y la intervención del poder económico en los procesos para renovar el poder público; justicia para que el pueblo tenga mejores condiciones de vida, para recuperar la paz en las regiones azotadas por la violencia y el crimen organizado y lograr un marco legal para la justicia transicional; y justicia para que una persona que ha dedicado su vida al trabajo tenga como mayor honor un retiro digno, seguridad social y sistema de pensiones y retiro. En todos estos temas estamos trabajado en el Congreso.

No me quiero extender más en atención a su valioso tiempo. Finalmente quiero agradecer nuevamente al senador Ricardo Monreal la realización de este foro que será en beneficio de la justicia que reclaman todos los mexicanos.

Por último, decirles que cuentan con la Cámara de Diputados y en especial con el Grupo Parlamentario de Morena para cristalizar las reformas que sean necesarias para consolidar el modelo de justicia auténtica y para todos en el gobierno de la Cuarta Transformación.

Muchas gracias y buenas tardes a todas y a todos.

LINK PARA DESCARGAR VIDEO:
https://youtu.be/ezYQMruwbV0