DIPUTADO ALMA DELIA NAVARRETE RIVERA (ADNR). Buenos días. Gracias, presidenta.

Estamos en la posibilidad que esta legislatura transite hacia la verdadera democracia. No le tengamos miedo al pueblo.

Compañeras y compañeros legisladores, mucho se ha hablado sobre la constitucionalidad y la pertinencia de preguntarle al pueblo si está de acuerdo o no en esclarecer las decisiones que han tomado los expresidentes durante sus mandatos.

Sin embargo, no nos confundamos, hoy no venimos a pronunciarnos sobre la viabilidad jurídica, toda vez que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya se pronunció a favor.

Concurrimos a este pleno para llevar a cabo un verdadero ejercicio histórico de participación democrática que permitirá a las ciudadanas y a los ciudadanos participar, opinar, evaluar y decidir sobre las acciones que debe de adoptar el Estado mexicano.

Como legisladores, solo nos corresponde calificar la trascendencia nacional del tema que ha de llevarse a cabo en la consulta, pero dicha calificación está más que acreditada con el cuestionamiento permanente a las conductas de acción u omisión que realizaron esos actores políticos en años pasados durante su encargo.

Las y los mexicanos tenemos derecho a saber más allá de la verdad histórica, a modo, sobre la procedencia de la casa blanca, por ejemplo, las imputaciones de la estafa maestra, qué pasó con los 43 estudiantes desaparecidos, qué pasó con los beneficiarios de Odebrecht, de Tlatlaya, sobre los señalamientos del narcoestado en el que hemos vivido.

Les llama la atención la palabra narcoestado, han estado y han encabezado ese narcoestado todos ustedes.

¿Y, por qué sus dos exsecretarios detenidos en Estados Unidos están siendo procesados?

También, tenemos derecho a saber sobre el enriquecimiento inexplicable de los funcionarios, sus amigos y los familiares de estos funcionarios, del deterioro y desvío de recursos de las instituciones públicas.

Hay una lista infinita de delitos, de abusos que hicieron los gobiernos anteriores. Es evidente que la crisis económica, la pobreza, la corrupción, la violencia, la degradación del núcleo social no pudieron existir sin la cooperación de la más alta esfera del gobierno. Esto no llegó gratis, esto se creó desde las cúpulas del poder.

Los miles de desaparecidos, las víctimas y la inseguridad que permea en el país no pueden explicar sin las decisiones tomadas por los que no estaban obligados a comparecer ni a declarar en juicio. Claro que vivíamos en un Estado de excepción, no todos los mexicanos eran iguales, los expresidentes tenían el beneficio de no ser enjuiciados. Este país merece que todos los ciudadanos tengamos los mismos derechos y las mismas obligaciones.

Por lo anterior, nadie puede cuestionar la trascendencia de la consulta. No le tengan miedo al pueblo. Ya que, sin mencionar nombres, todos y todas saben, saben los que estamos aquí y el pueblo de México, saben a quién nos estamos refiriendo.

Les decimos a todos los mexicanos, les decimos a la oposición: no se confundan. El pueblo de México no quiere sangre, quiere justicia.

Gracias.

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https://youtu.be/tiK65zwaeBM