DIPUTADO MARIO DELGADO CARRILLO (MDC). Gracias. El Presidente de la República entendió desde el principio el mandato de cambio que le dio la gente, no sólo como un cambio del sistema político, sino también un cambio del modelo económico y ése ha sido su objetivo desde que empezó la administración.

Y justamente, a seguir a una economía más solidaria, menos desigual, somos una de las economías más desiguales, con mayor concentración de ingreso en todo el planeta, con bajísimas tasas de crecimiento, con un modelo económico que se desarrolló en los últimos años, donde pues básicamente el centro era la corrupción.

Entonces, el Presidente se ha atrevido, por ejemplo en su documento en el Plan Nacional de Desarrollo, a decir “tenemos que cambiar el modelo económico”, donde el Gobierno no pretende ir hacia un gobierno intervencionista en la economía, como en el Desarrollo Estabilizador que tuvimos en México, donde el Gobierno tenía empresas de todo, pero tampoco a un Estado mínimo porque la sospecha de la corrupción, fomentaba la teoría de que el Gobierno todo lo que toca lo descompone, y el único capaz de generar valor agregado es la empresa privada. Entonces, el Estado tenía que replegarse y ser un estado mínimo.

El Presidente dijo “vamos a crear un Estado que cree valor, que tenga posibilidades de influir en el desarrollo económico”, de generar estos ecosistemas de los que hablas, pero con una visión social mucho más incluyente, mucho más solidaria.

Ahora, todo lo que nos has dicho ahora, Juan Antonio, casi estás describiendo hacia dónde queremos ir, o sea cuáles son las características del modelo económico que quisiéramos en México, porque además tenemos un potencial muy grande para ello, porque los mexicanos somos muy solidarios entre nosotros, se demuestra una vez más ahora en esta crisis.

Sin embargo, creo que no hemos aprendido a ser solidarios, formar comunidad y formar empresas, desarrollar el modelo cooperativo. Yo creo que hay un potencial ahí muy grande.

Y si el Gobierno se enfoca a tratar de desarrollar, a generar estos ecosistemas para que se desarrollen este tipo de empresas sociales, yo creo que tenemos un potencial muy grande.

Me gusta mucho oír, también, Juan Antonio, el concepto de desarrollo regional. En México hace mucho que no hablamos de desarrollo regional, incluso en los proyectos de infraestructura pública no hay una visión… en los últimos 30 años no hubo una visión de desarrollo regional, se hacían obras por conveniencia, por la lógica de la corrupción, y ahora, por primera vez, la inversión pública tiene una lógica de desarrollo regional.

Por ejemplo, el Presidente, uno de los proyectos del Presidente es el Tren Maya, el Tren Maya no es un tren, es una palanca de desarrollo de toda una región donde lo más importante del tren es la integración de las economías de toda la región.

Entonces, utilizar la inversión pública, la infraestructura pública para detonar el desarrollo regional y la economía social, ahí habrá un potencial tremendo para muchas cooperativas productivas en torno a este tren.

O lo mismo el Tren Transístmico, que es desarrollar en la cintura de México un corredor de desarrollo que conecte al Océano Pacífico con el Golfo de México fortaleciendo los dos puertos, pero otra vez, ahí lo más importante es el desarrollo regional.

Entonces, yo creo que tenemos mucho que aprender todavía, creo que tenemos, ya ahí con el apoyo del INAES, creo que tenemos cuestiones importantes que modificar en la ley de economía social y solidaria, también la ley de sociedades cooperativas, en la ley de sociedades mutualistas, para formar mejor este ecosistema.

Y lo del empleo, es fantástico lo que tú dices. Aquí lo que pasó en México es, apenas en un mes del cierre, de esta cosa de la pandemia, se fueron 500 mil empleos, o sea, no hay ninguna solidaridad en la gran mayoría de las empresas.

Yo estoy seguro que pues prácticamente todas las empresas, sobre todo las grandes, tendrían muchas posibilidades de mantener a los empleados en la nómina, por lo menos un mes, dos meses; sin embargo pues vamos a llegar ya al millón de desempleos, porque la persona no es la que importa, lo que importa es la utilidad.

Y la otra, y con esto termino, ¿por qué puede ser éste el camino?, porque somos una economía donde el 60, 65 por ciento es informal, y durante muchos años los gobiernos neoliberales pensaban que el tránsito de la informalidad a la formalidad era el cobro de impuestos.

O sea, siempre perseguían al sector informal para que pagara impuestos porque según ellos, con eso lo formalizaban. La economía social, como lo planteas aquí, puede ser la vía para transitar de una economía informal a la formal que genere mayor valor agregado.

Bueno, pues ya me callo yo. Tienen ustedes muchas más cosas interesantes que decir que yo. Les agradezco muchísimo la oportunidad de participar, de que estén aquí ponentes de altísimo nivel.

Saludo a muchísimos compañeros y compañeras diputadas que están conectados. Muchísimas gracias.

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