DIPUTADA ALEIDA ALAVEZ RUIZ (AAR). Con su venia diputado presidente.

Con mucho gusto vengo a respaldar esta reserva que hace mi compañero Viedma sobre adecuaciones a esta reforma constitucional que estamos hoy aprobando.

Y digo con mucho gusto, porque por primera vez en nuestra Constitución vendrá la figura de revocación de mandato y por primera vez la consulta tendrá umbrales menos exigibles a como los pusieron ustedes cuando se negaron a la participación de la gente, cuando tenían las mayorías.

En manos de los que ahora no son mayoría estuvo el bajarle el umbral de ese 40 por ciento que dice ahora la Constitución en su artículo 35, a ese 15 que quieren conquistar.

¿Por qué no empezar ya con estos mecanismos de democracia directa? Yo quisiera también secundar estas adecuaciones, porque creo que hay que tener un poco más de congruencia en nuestros planteamientos. Porque necesitamos aquí despertar un poco la memoria de quienes ahora quieren olvidarse de las decisiones que tomaron en antaño, y ahora vienen a ser quienes nos quieren imponer métodos absurdos para lograr estos instrumentos de democracia directa.

A los que convenientemente se les olvida la historia de este país; una historia marcada en los últimos tiempos por el saqueo, la traición a la patria, miles de desaparecidos, corrupción y una total impunidad, una dolorosa impunidad. Y muchos otros tantos infortunios que nos llevaron a la desgracia nacional que hoy estamos tratando de remediar.

Al analizar este dictamen tenemos que poner en perspectiva el desarrollo democrático del país desde que se entregaron a los brazos del neoliberalismo, décadas tuvimos estas propuestas congeladas en estas mismas legislaturas que se discutieron y que no fueron a trascender nunca en una reforma constitucional, ambos mecanismos; ni la consulta ni la revocación de mandato. Las tuvieron congeladas durante las décadas que fueron poder.

¿Cuándo además consultaron al pueblo sobre la privatización de los bancos, sobre el Fobaproa, sobre la privatización de la industria eléctrica, sobre el remate que hicieron de los bienes nacionales?

En la reforma que discutimos sobre consulta popular, pusieron todos los candados habidos y por haber para que la gente no opinara con respecto a nuestro petróleo, y después por eso no se pudo habilitar una consulta sobre privatizar o no nuestra industria petrolera, que finalmente se salieron con la suya.

Ahora que hay mecanismos más nobles, más loables, más accesibles, quieren de todas maneras trabar este avance que hoy conseguimos con esta reforma constitucional.

Por eso quisiera llamar a mis compañeras y compañeros de bancada y a esta mayoría que hoy legítimamente representamos. Ya no permitamos más esa democracia alquimista que querían imponer e impusieron durante décadas.

Vayamos con estas reservas a hacer métodos más nobles, 25 por ciento para que la consulta sea vinculatoria. Eso es suficiente y es loable para que podamos tener un instrumento de participación de democracia directa.

Es cuanto diputado presidente.