DIPUTADA DOLORES PADIERNA LUNA (DPL). Gracias presidente. En primer lugar quisiera agradecer las palabras que desde ayer estamos escuchando de las y los legisladores de México, por esa comprensión de la grave situación que se puede presentar de cumplirse las amenazas del presidente de Estados Unidos.

Agradecer también a las y los legisladores de Estados Unidos que han sido solidarios con México y que ayuda mucho y denota que se pone por delante el interés nacional, muy a diferencia de lo que hace Donald Trump, de poner su interés personalísimo de ganar una elección, por encima de lo que pueda señalar su propia Constitución y el Tratado de Libre Comercio.

Nosotros debemos de recalcar que desde 1994 México y Estados Unidos han venido intensificando sus relaciones; las exportaciones de México hacia ese país han venido creciendo a razón de 8.9 por ciento promedio anual, las importaciones han venido creciendo 6.4 por ciento anual, y entre México y Estados Unidos somos socios, y México es el principal socio de Estados Unidos.

En 2018 las exportaciones representaron el 79 por ciento y las importaciones el 46 por ciento con ese país, por eso la balanza comercial de México es favorable en 142 mil 457 millones de dólares al cierre del 2018.

A pesar de todo esto, Estados Unidos ha continuado haciendo amenazas constantes a nuestro país, acciones que entorpecen las relaciones comerciales. Primero se aplicó de manera unilateral aranceles al acero y al aluminio, luego las exportaciones del jitomate mexicano, y ahora, la semana pasada o hace unas semanas, Donald Trump habla de imponer un arancel del 5 por ciento creciente hasta el tope de 25 por ciento a todas las mercancías que exporta México a ese país.

En este caso, la medida debe verse como una represalia porque no la está ubicando en el terreno económico, ni siquiera de las relaciones comerciales, sino lo hace para obligar a México a frenar la migración centroamericana hacia ese país, y hay que decir que esas no son razones económicas, son extra comerciales, son extra Tratado Libre Comercio y violan las reglas del libre comercio.

Pero en relación a la migración, la posición del Presidente López Obrador, y con mucha razón, ha sido no con acciones coercitivas sino presentando un programa de desarrollo regional que ataque de fondo las causas de la migración, lo que definitivamente no ha estado nunca en la agenda de Estado Unidos.

Está abierta la posibilidad de llegar a acuerdos para evitar que la nueva amenaza se convierta en una realidad, se estima desde luego que México no debe acceder a la presión de Estados Unidos de frenar la migración centroamericana, ya que eso implicaría violación de derecho humanos y se busca, más bien, no buscan el destino de México sino Estados Unidos como país de destino.

Es importante también señalar que las continuas amenazas de Donald Trump no han impactado, afortunadamente, las relaciones comerciales entre México y Estados Unidos, tan sólo entre 2017 y 2018 las exportaciones mexicanas a Estados Unidos aumentaron 9.6 por ciento, y durante el primer trimestre de 2019 han aumentado 4.2 por ciento.

México tiene varias opciones, una sería la aplicación de aranceles a las importaciones de Estado Unidos por un monto equivalente, pero eso sí está previsto en el Tratado de Libre Comercio pero implicaría que se presione a los consumidores y eso no nos gustaría de ninguna manera.

Otra sería acudir a la solución de controversias, que también considera el Tratado de Libre Comercio para América del Norte, aún vigente, aunque este mecanismo es muy tardado y no podemos dilatarnos tanto en una solución.

Está también el multilateralismo, acudir como lo están solicitando China, la India, Europa, Corea, todos los países de América Latina que felices aceptarían el jitomate y otros productos mexicanos de altísima calidad. Pero eso lleva un tiempo, hay que empezar, lleva un tiempo.

Y por ello es importante este punto de acuerdo que presenta la senadora, porque permite prevalecer lo primero que se ha puesto por parte del gobierno, una negociación; primero hablar, primero tratar de dar argumentos sobre bases racionales, no sobre las que está queriendo Donald Trump.

Debemos afirmar que la aplicación de aranceles no le conviene ni a Estados Unidos ni a México, es un asunto meramente electoral que está proponiendo Donald Trump por su campaña.

Pero deseamos, pues para terminar, que prosperen las negociaciones de la delegación mexicana, que se están haciendo con el más alto nivel, con Mike Pence, el vicepresidente Estados Unidos, y Mike Pompeo, el secretario de Economía, con la delegación mexicana, que este punto de acuerdo convoca a dialogar posteriormente a su viaje para juntos discutir qué se puede hacer ante la nueva situación. Muchas gracias.

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https://youtu.be/ePKx3mlW6Yk