DIPUTADO MARIO DELGADO CARRILLO (MDC). Muchas gracias, buenas tardes a todas y a todos; compañeros, compañeras, diputados, diputadas, presidentes de Comisión; distinguidos invitados que nos acompañan el día de hoy, doctor Enrique Graue, bienvenido; también Rolando Cordea, me da mucho gusto verte Rolando; Enrique del Val, y todos quienes nos visitan el grupo consultor asesor, felicitarlos por el trabajo que hicieron en este tema tan relevante.

Y bueno, reiterar una vez más, lo hacemos en cada ejercicio que llevamos a cabo, la voluntad de esta Legislatura de hacer del parlamento abierto hacer un ejercicio cotidiano y común para los temas importantes de esta Cámara y de la nación.

Saludo también a mi compañero Reginaldo Sandoval, coordinador del grupo parlamentario del Partido del Trabajo, integrante de la Junta de Coordinación Política.

Bueno, creo que es importante el hecho que se haya abierto la discusión del Plan Nacional de Desarrollo porque la convocatoria que hizo el Presidente de la República fue por demás provocadora, él dijo “no estamos ante la discusión de un Plan Nacional de Desarrollo más, sino la construcción del modelo posneoliberal, el cierre del modelo económico neoliberal, terminar con ese capítulo, -que por cierto Stiglitz publicó hace apenas dos semanas algo así también el fin del neoliberalismo-“, y el reto de construir algo diferente, el reto de atender el llamado al cambio que se tuvo en las urnas el pasado 1º de julio, y que pues tiene que verse en el plan del país para su desarrollo en los siguientes años .

Y me parece muy profundo la discusión a la que nos llama el Presidente de la República, porque en los últimos años ha prevalecido una definición del Estado, en los últimos 36 años durante el modelo neoliberal, que hay que tener un Estado lo más pequeño posible, alejarlo de los sectores productivos, de la economía, un Estado pequeño regulador porque no genera valor.

Y los resultados que hemos visto pues son claramente insatisfactorios, insuficientes; un crecimiento económico del 2 por ciento en promedio, un aumento sostenido de la pobreza, un aumento de la desigualdad del ingreso, y una creciente ola de violencia e inseguridad.

Entonces el Presidente de la República dice “bueno, vamos a una definición diferente”, implícitamente lo que está planteando es que la definición del Estado sea diferente, no para regresar a un Estado empresarial, interventor en la economía, que no funcionó, sino para generar un Estado, tener un Estado que genere valor y es lo que está detrás de cada una de las propuestas.

Por ejemplo, ¿por qué no plantear una redefinición del sistema fiscal, por qué no plantear nuevos ingresos, nuevos impuestos?, porque es momento de revisar cómo gastamos, tenemos un gasto absolutamente improductivo que el Inegi mide con el valor agregado en cada uno de los sectores donde es cercano a cero o negativo. Ha crecido los recursos del Estado en los últimos años, pero no hemos sido eficaces en ofrecer servicios públicos y condiciones que mejoren el bienestar.

La OCDE también mide el índice de Gini antes y después de la intervención del gobierno, y México es de los países donde menos impacto se tiene, gastamos muy mal; si no gastamos mejor, el Estado no tiene legitimidad para salir y pedirle más impuestos al sector productivo o a las familias mexicanas, ésa es una definición diferente a la que ha prevalecido en los últimos años.

Por eso el tema de la austeridad no es un asunto menor, lo que implica es una profunda reforma al gasto público, que por supuesto no es sencilla y vemos ahora que de repente tenemos algunos brincos, algunos desajustes, pero es normal en un gobierno que está tratando de ser más eficaz, más austero y que el gasto público tenga mayor impacto en la economía.

Entonces sí, claro que todos los indicadores nos dicen que tenemos ingresos insuficientes, pero mientras no estemos seguros, el destino de cada peso y el impacto que éste genere, el Estado no va a tener la legitimidad de salir a pedir mayores impuestos; y esta austeridad, esta eficacia tiene que extenderse también a las haciendas locales, donde el discurso de la austeridad no está penetrando.

El tema del combate a la corrupción. El mayor incentivo que pueda haber a la inversión pública y privada en nuestro país, sin duda es erradicar la corrupción; lo que ha desacreditado a las grandes obras de infraestructura en nuestro país es la corrupción.

Alguien decía por ahí, “no, es que nos falta más recursos para impulsar la infraestructura”; el hecho de poder terminar con la corrupción y darle transparencia, va a ser un impulso como nunca antes a la infraestructura, incluso también a la infraestructura pública, a la inversión pública que el año pasado alcanzó, si la medimos como porcentaje del Producto, la cifra más baja desde la Segunda Guerra Mundial, el Estado nunca había invertido tan poco en comparación con el tamaño de la economía como el año pasado.

Y otra vez, la idea implícita detrás era que debíamos disminuir lo más posible la participación del Estado en la economía.

Para qué la infraestructura, cuál es otro planteamiento que hace el Presidente en el Plan Nacional de Desarrollo. La infraestructura como palanca de proyectos de desarrollo regional, que eso es algo que pues no hemos tenido en nuestro país, si vemos por lo menos los últimos tres planes nacionales de desarrollo y después planes posteriores de infraestructura, es un listado de obras; pero no hay una visión de desarrollo regional, y los tres grandes proyectos de inversión que hasta el momento tenemos el gobierno, llevan implícita una visión de desarrollo regional.

El Tren Maya es una estrategia de desarrollo regional, no es una infraestructura ferroviaria; lo mismo que Tren Transístmico, pues es una estrategia de desarrollo regional dentro de una visión global de flujos de comercio entre Asia y Europa como alternativa al Canal de Panamá.

Otra vez, el Estado que genera valor; aprovecha el Gobierno la gran inversión social que va a ser para promover un acento fundamental para el desarrollo, que es la inclusión financiera.

Sí, los programas sociales, al entregarlos de manera directa y a través de un instrumento financiero, va a provocar que muchas personas, millones de personas que están fuera del sistema financiero entren.

Y otra visión, también del Gobierno, de un Estado que genere valor, utilizar la política fiscal como instrumento para promover el desarrollo económico. La disminución de impuestos planteada en la frontera norte, se aleja en gran medida de la visión de la política fiscal en los últimos años, donde parecía que la prioridad del Gobierno era cuidar su caja, sin importar que se afectara la caja o de las empresas o el bolsillo de las familias.

El mantra de los últimos gobiernos neoliberales era “finanzas públicas sanas, incluso aún de una economía muerta”. El hecho de poder renunciar a recaudación en el corto plazo para apostar en lograr una zona más competitiva, en la frontera del país, y que se genere mayor crecimiento económico, pues sí es una visión diferente que está planteando este gobierno más comprometida con el desarrollo económico.

Y finalmente, la mezcla de todo esto pues lo que logra es una visión, como lo decía aquí Alfonso Ramírez Cuéllar, con el crecimiento económico, que ha sido pues el niño huérfano de nuestra economía en los últimos años. El Banco de México cumple de manera puntual sus objetivos de mantener la inflación dentro de las metas, de tener una política monetaria estable, y el Gobierno nos presentaba como su gran meta o como su gran logro el mantener finanzas públicas sanas.

Pero el crecimiento económico qué, ¿quién se hacía responsable de él?, nadie y ahí están los resultados. Entonces, dentro del Plan hay una visión de un gobierno que se hace responsable en generar condiciones para un mayor crecimiento económico y con ello, como dice el Presidente de la República, cambiar como el gran objetivo de este Plan, el bienestar de la mayoría de la población.

Entonces no me queda más que felicitarlos por el esfuerzo que hicieron, porque nos circunscribimos dentro de este debate tan profundo al que el Presidente de la República nos invitó, lanzando este reto la construcción de un modelo económico que dé resultados para la mayoría de la población.

Me dejó un recado Porfirio, que clausure yo, si están ustedes de acuerdo. ¿Sí?

No pues ustedes son aquí. Entonces ¿ya de una vez o falta alguien más de participar?

Bueno, pues en este 10 de junio, siendo las 13 horas con 15 minutos, pues declaro clausurado este foro de desarrollo económico del Plan Nacional de Desarrollo.

Muchas felicidades a los participantes.

LINK PARA DESCARGAR VIDEO:
https://youtu.be/g2FBK5lYE2o