DIPUTADA ERIKA MARIANA ROSAS URIBE (EMRU). Compañeras y compañeros diputados, por todos es conocido que cualquier país que aspire al crecimiento, al desarrollo y a la transformación debe sentar sus bases en una educación de calidad, vanguardista y a la altura de las necesidades de nuestros tiempos.

También sabemos que eso no puede suceder sin la participación, crecimiento, formación y desarrollo de unos de sus grandes pilares: el magisterio. A continuación votaremos uno de los eslabones que se derivan de la reforma constitucional en materia educativa que aprobamos y fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el pasado 15 de mayo de este mismo año.

En lo que se refiere al documento en discusión, en dicha reforma logramos el consenso al manifestar el respeto de los derechos de las maestras y los maestros el compromiso de realizar las acciones para mejorar las condiciones bajo las cuales prestan sus servicios educativos y reconocer en el magisterio un agente de transformación social y su contribución a la educación en nuestro país.

Coincidimos en que no solo se requiere de una evaluación estandarizada, sino que es necesario garantizar el derecho de acceso a un sistema de capacitación, formación y actualización, para así lograr la mejora continua de la educación.

De igual forma, reconocer a los docentes como agentes fundamentales del proceso educativo, así como su contribución a la transformación social. Darle al magisterio el reconocimiento social que tiene la labor que desempeña, así como el efecto que este tiene en el aprendizaje y desarrollo de los educandos.

Lo anterior significa hacer atractiva la profesión, regresar al docente el rol fundamental que tenían en las comunidades. Que aquellos quienes ejercen la profesión gocen de reconocimiento social, un ingreso digno y el desarrollo profesional que se requiere a la altura de las demandas de la sociedad mundial como agentes del cambio social.

Asimismo, se acordó que la ley establecería las disposiciones del sistema para la carrera de las maestras y los maestros, en sus funciones docentes, directiva o de supervisión, correspondiendo a la federación su rectoría y en coordinación con las entidades federativas su implementación.

Así pues, se estableció un esquema de coordinación entre poderes y se reconoce la distribución de competencias entre la federación y las entidades federativas para la prestación de los servicios educativos. La federación con la rectoría para la emisión de los lineamientos que se dicten para el funcionamiento del sistema para carrera de las y los maestros, mientras que los responsables de su implementación serán las entidades federativas en un esquema de federalismo educativo.

La presente ley contiene tres puntos fundamentales. El primero, un nuevo esquema de admisión, promoción y reconocimiento en mesas tripartitas donde participará la federación, las autoridades educativas de las entidades federativas y las representaciones sindicales, en el que existan lineamientos integrales bajo procesos públicos transparentes, equitativos e imparciales, que consideren los conocimientos y aptitudes necesarios para la formación, el aprendizaje y el desarrollo de los educandos.

Estos procesos de selección, admisión, promoción y reconocimiento, estarán fundamentados en darles herramientas a los docentes para que desempeñen mejor su función poniendo especial atención en los objetivos de capacitación y mejora continua.

La permanencia en la labor docente no quedará sujeta en ningún caso a procedimientos que impliquen algún tipo de evaluación o evaluación prevista en el sistema para la carrera de las maestras y los maestros.

Estamos convencidos que con la aprobación de esta ley se revaloriza la labor docente y se avanza en lograr una enseñanza de calidad que permita a los educandos colocarse en los primeros lugares a nivel mundial. Por lo anterior, votaremos a favor de la presente. Es cuanto.

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https://youtu.be/8lrYA0toa8A