DIPUTADA ERIKA MARIANA ROSAS URIBE (EMRU). Con la venia de la Presidencia. Compañeras diputadas y compañeros diputados, saludo con respeto al señor secretario de Educación Pública y al equipo que le acompaña a esta sesión de la glosa del Primer Informe de Gobierno del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.

Desde que inició la presente administración ha sido convicción, tanto del gobierno como de la presente legislatura del Congreso de la Unión, revalorar los derechos y el papel del magisterio en la educación pública de México.

Las maestras y los maestros de México constituyen la voz y el alma del conocimiento, de los valores y de la orientación que el estudiantado mexicano requiere para consolidar en su vida los más altos niveles de desarrollo humano y de desempeño. No sólo para su vida laboral, sino también para que en forma permanente tengan sentido de cooperación para su entorno, su comunidad y su patria.

Es por ello que el magisterio requiere, como nunca, la garantía por parte del Estado para que sean respetados sus derechos y, asimismo, para contar con las herramientas que permitan la mejora continua de su desempeño en las aulas.

En el contexto del espíritu de la actual administración, para fortalecer el reconocimiento de las maestras y los maestros destacan dos programas descritos en la política educativa dentro del Primer Informe de Gobierno. Uno, es el Plan de Apoyo a la Calidad Educativa y a la Transformación de las Escuelas Normales. El segundo, es el relativo al Programa para el Desarrollo Profesional Docente.

Es de destacarse la vigencia de ambos programas como los pilares del decidido apoyo del Estado a la formación y labor del profesorado mexicano.

Respecto de la transformación de las escuelas normales, el informe destaca haber dedicado cerca de 500 millones de pesos, es decir, 6.2 por ciento más que el año anterior para apoyar sus diversos proyectos y programas de movilidad, capacitación e infraestructura.

En el segundo tema, el relativo al desarrollo profesional docente, se ha revalorado el espíritu de respeto a la trayectoria de cada maestra y maestro, con el reconocimiento del deber del Estado de proporcionar formación continua, sustentada en un documento base también enunciado en el informe.

Tomando en cuenta la gran importancia que ambos programas tienen para fortalecer el papel del magisterio en la educación nacional, quisiera formularle las siguientes preguntas.

La primera: ¿cuáles son los rasgos distintivos de la transformación en las escuelas normales en el país? La segunda: ¿qué metas o aspiraciones se tendrían para la transformación de las normales durante la presente administración, de tal forma que se distingan de lo realizado en el pasado? Por su atención y sus respuestas, muchas gracias, señor secretario.