-           Enfatizó que las consecuencias de la pandemia deberían conducir a un nuevo modelo de desarrollo centrado en el bienestar de los seres humanos y no en el capital, que es justamente lo que está proponiendo México al mundo

La Vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna Luna, afirmó que un instrumento que favorecerá al país en medio de la crisis económica y sanitaria por la pandemia del Covid-19, será la entrada en vigor del T-MEC programada para el primero de julio, el cual ayudará a la recuperación económica porque, entre otras cosas, establece la obligación de aumentar el contenido nacional en las exportaciones.

Señaló que el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) llega en un momento muy oportuno y enfatizó que las consecuencias de la pandemia deberían conducir a un nuevo modelo de desarrollo centrado en el bienestar de los seres humanos y no en el capital, “eso es justamente lo que está proponiendo México al mundo”.

“Al mismo tiempo debe hacerse un gran esfuerzo para sustituir las importaciones en todos los campos; dentro de la estrategia del Presidente Andrés Manuel López Obrador está el producir nacionalmente todo lo que sea posible para ir reduciendo la dependencia económica del exterior y reducir los problemas en la balanza comercial externa”, expuso.

Mencionó que la guerra comercial decretada por Estados Unidos contra China, su respuesta de “aranceles espejo” y una serie de desencuentros entre ambas naciones, han permitido que México se coloque como primer socio de la Unión Americana, desplazando a China.

“Estados Unidos ha dispuesto de casi 3 billones de dólares para rescatar su economía, lo cual va a alentar a la economía mexicana. Por ello, el gobierno decidió reclasificar como esenciales a la industria automotriz, de la construcción y la minería, esta última engarzada más hacia Canadá.

Por otro lado, consideró inviables las propuestas del sector empresarial para enfrentar la crisis económica derivada del coronavirus, ya que los ingresos públicos son escasos dado que la recaudación en México es apenas del 16% del PIB, de las más bajas de los países de la OCDE y de América Latina, lo cual obedece al elevado porcentaje de informalidad y la vigencia de los regímenes de privilegio que permiten eludir el pago de impuestos a los “grandes contribuyentes”.

“De ahí la necesidad de llevar a cabo una reforma fiscal, no para aumentar impuestos, pero sÌ para eliminar los regímenes fiscales de privilegio”, indicó.

Padierna Luna remarcó que el “paquete de deuda” como el que plantea el CCE resulta riesgoso ya que la capacidad de pago de la deuda se ha reducido, esta se determina por múltiples factores, su monto, plazo, tasa, calificación, porcentaje del PIB, entre otros, sin embargo, se abusó de esta herramienta económica y hoy los recursos son escasos, las necesidades muchas, “aumentar más la deuda debe ser el último recurso no el primero”, insistió.

“En la propuesta del CCE no hubo una sola línea que se refiriera a los pobres que constituyen la mayoría de la población. Al parecer, para un sector del empresariado no existen o no vale la pena mencionarlos. Esa particular visión que excluye a las mayorías ha ido acompañada de expresiones lamentables alentadas desde ciertos sectores empresariales”, acotó.

Finalmente, afirmó que exigir la salida de un presidente electo democráticamente por una amplia mayoría, revela el carácter antidemocrático y de tintes golpistas de la oposición del claxon. En este sentido, abundó que este es el costo de gobernar para la mayoría, de tener como prioridad a los más desprotegidos.

“Es lamentable que frente a esta crisis inédita por la pandemia del coronavirus, insistan en las viejas y fallidas recetas, y sean incapaces de ver más allá de la burbuja de sus privilegios”, apuntó.

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