DIPUTADO IGNACIO MIER VELAZCO (IMV). Buenas tardes, ya casi, a todas, a todos; especialmente, para mí es un motivo de orgullo, de honor, recibir en nombre del Grupo Parlamentario de Morena, al embajador de nuestro vecino comercial, nuestra frontera que nos une, que nos une muchas cosas.

Nos une la cultura, el mismo idioma en muchas regiones, nos une la migración, nos une la seguridad. Y tenemos lazos comerciales, los más importantes de nuestro país con Estados Unidos. Su presencia es importante para nosotros.

Amigas, amigos, diputadas, diputados, medios de comunicación. “Amigo” en español o “friend” en inglés, es una palabra poderosa. La amistad es una de las relaciones más fuertes y auténticas que el hombre establece en su vida. Hablar de amistad es hablar de solidaridad, de compañerismo, de valores, de poesía, como la de Jorge Luis Borges.

“No puedo darte soluciones para todos los problemas de la vida, ni tengo respuestas para tus dudas o temores. Pero puedo escucharte y compartirlo contigo. No puedo cambiar tu pasado, ni tu futuro, pero cuando me necesites estaré junto a ti. No puedo evitar que tropieces, solamente puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas. Tus alegrías, tus triunfos y tus éxitos no son míos, pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz”.

Si los hombres, las mujeres, pueblos y gobiernos pueden establecer relaciones de amistad, por qué no lo habríamos de hacer los parlamentarios. Este es el motivo que hoy nos reúne, instalar este grupo de amistad entre los legisladores mexicanos y estadounidenses.

Del gobierno, de los parlamentarios y del pueblo estadounidense, hemos recibido un trato respetuoso. Comprensión mutua ante los complicados momentos que vivimos en ambos lados de la frontera.

Podemos hurgar en la historia de nuestros países, buscando motivos para distanciarnos. Pero prefiero encontrar causa para estrechar nuestra amistad.

En los momentos más oscuros de la segunda invasión francesa a México y cuando Estados Unidos salía de su guerra civil, Benito Juárez estableció un gran entendimiento con Abraham Lincoln, quien nunca reconoció a Maximiliano como emperador.

En los complicados días, previos a la Segunda Guerra Mundial y cuando México expropió su petróleo, Franklin Delano Roosevelt y el general Lázaro Cárdenas del Río, lograron un buen entendimiento.

Los soldados estadounidenses, el petróleo y los trabajadores mexicanos fueron clave para derrotar el nazismo que había invadido a Europa.

La inmensa frontera que compartimos, pero sobre todo, las intensas relaciones entre nuestros pueblos, nos obligan a elevar la mira y realizar los mayores esfuerzos para establecer mejores relaciones de comunicación y colaboración en materia económica, migración, cultura y trabajo.

Compañeras y compañeros, estimado embajador, les propongo hacer votos por la paz y para que los pueblos hoy en conflicto bélico encuentren el camino del entendimiento.

Existe colaboración entre nuestras naciones y pueblos, frente a nuestros ojos tenemos un presente complejo, pandemias, guerras, cambio climático, tenemos que darnos la mando para enfrentarlo y sobre todo para caminar hacia el futuro.

Que este grupo de amistad sea para el bien de México y para el bien de la relación con el pueblo hermano, los Estados Unidos.

Quiero señalarle que no se distorsione la posición de nuestro país frente al conflicto que se vive entre Ucrania, la República libre de Ucrania, con la República Rusa, lo hemos condenado de manera enérgica, México no, de ninguna manera, bajo ninguna forma, con ninguna expresión, ni con la instalación de comités, cambia su posición en la que repudia la invasión de un país a otro. Porque México lo ha vivido históricamente y por eso señalaba la invasión a nuestro país por parte del imperio francés y la invasión que sufrimos también desde la Conquista.

México es un país digno, tiene en Estados Unidos un aliado; nos unen, como dije, muchos lazos. Seguramente este Grupo de Amistad va a fortalecer esos lazos y encontraremos en el respeto a la soberanía de ambos países los causes que permitan que América del Norte se convierta efectivamente en una potencia de colaboración, de amistad y que abata la desigualdad.

Bienvenido.