DIPUTADO IGNACIO MIER VELAZCO (IMV). Hoy me quiero referir a un tema que está causando, causa, indignación, causa preocupación, causa frustración en familias mexicanas y lastima profundamente a un segmento, quizás el más valioso para nuestra sociedad, que es el de ser mujer.

Y por eso les pedí, les molesté para que pudieran acompañarnos en esta reunión para manifestar que la Cámara de Diputados, el pasado 25 de octubre, aprobó por una amplia mayoría, un paquete de reformas que adiciona y deroga diversas disposiciones del Código Penal, del Código de Procedimientos Penales, de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de la Ley General del Sistema Nacional de Víctimas y de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en materia de investigación, sanción y reparación integral del delito de feminicidio.

El paquete de reformas aprobadas por los diputados, se le ha denominado como la Ley Reina, en referencia a la señora Reina González Amador, mujer 34 años, madre de dos niñas, que fue asesinada en 2021 por el llamado “Caníbal de Atizapán”; el asesino serial más cruel del Siglo XXI en México, al cual se le juzga por decenas de asesinatos de mujeres, cuya historia, con autorización de los familiares de Reina, sirvió de base para la serie de televisión El Caníbal, que patrocinó la Suprema Corte de Justicia de la Nación con el propósito de visibilizar y sensibilizar a la población sobre este flagelo.

El objetivo de estas reformas es garantizar que las niñas, adolescentes y mujeres tengan una vida libre de violencia. Proporciona a las autoridades encargadas de la administración de justicia herramientas para prevenir y sancionar el feminicidio.

Los cambios son congruentes para atender el fenómeno del feminicidio, que vulnera y lastima a nuestra sociedad. Se trata, hay que reconocerlo plenamente, es una epidemia social, que, si bien no es exclusiva de México, en nuestro país adquiere relieves de tragedia por los altos índices de impunidad y por la corrupción del sistema judicial mexicano, a pesar, hay que señalarlo, de los esfuerzos que en este sentido ha impulsado el presidente de la Suprema Corte, Arturo Zaldivar.

La numeralia es amplia. Un dato llama a la reflexión. En México se asesinan diariamente a 11 mujeres. ¿Qué vamos a hacer?, ¿qué se necesita para cambiar y que esto no ocurra, no vuelva a ocurrir? La lista de víctimas es enorme.

No mencionaré sus nombres como muestra de respeto al dolor de sus familiares y seres queridos. Pero viene a mi memoria la imagen de la joven indefensa a la orilla de la carretera, que desapareció en la oscuridad de la noche; de la cantante asesinada a quemarropa en un restaurante de lujo; de la activista acribillada en un semáforo; de la madre buscadora asesinada por ser incansable en la exigencia de justicia para sus dos hijas desaparecidas. Todas ellas fueron madres, hermanas, hijas de una familia mexicana y ellas, sus familiares merecen justicia.

La Cámara de Diputados, como parte de un poder del Estado mexicano, no puede evadir su responsabilidad ante un tema de esta gravedad. Las reformas aprobadas por los diputados permitirán el acceso a la justicia y proporcionarán a las autoridades instrumentos para que ningún feminicida evada la acción de la ley.

Esta reforma precisa los supuestos penales para que las autoridades ejerzan con mayor eficiencia y eficacia sus labores, dando certeza jurídica a los familiares de las víctimas y a los propios acusados.

Las reformas establecen los supuestos en los cuales las autoridades y servidores públicos deben asumir una perspectiva de género. El cual se define: Es una visión científica, analítica y política sobre las mujeres y los hombres. Se propone eliminar las causas de la opresión de género como la desigualdad, la injusticia y la jerarquización de las personas basada en el género.

Promueve la igualdad entre los géneros a través de la equidad, el adelanto y el bienestar de las mujeres; contribuye a construir una sociedad en donde las mujeres y los hombres tengan el mismo valor, la igualdad de derechos y oportunidades para acceder a los recursos económicos y a la representación política y social en ámbitos de toma de decisiones."

Uno de los aspectos más terribles de un feminicidio es cuando éste fue cometido por un familiar o pareja. Cuando existen hijos o hijas menores de edad que corren riesgos al quedar bajo la custodia de un feminicida. Esta reforma garantiza el interés superior de la niñez al quitarle la patria potestad al que cometió dicho delito. También establece que ningún feminicida puede reclamar bienes o herencias de sus víctimas.

Si el feminicida es un servidor público se incrementa la pena, con lo que se pretende que aquellos que desempeñan alguna representación pública tengan, estrictamente, un comportamiento apegado a la ley. También las penas se incrementan cuando las víctimas son menores de edad, adultos mayores, están embarazadas o sean personas discapacitadas.

La simple elaboración y aprobación de estas leyes, estamos conscientes de ello, no van a cambiar la realidad. Para combatir el feminicidio y otras conductas debemos colaborar para construir una cultura diferente basada en la igualdad, la tolerancia y la justicia.

¿Qué estamos haciendo en la Cámara de Diputados? En esta Legislatura y en la anterior, la Cámara de Diputados ha garantizado plenamente la igualdad y la equidad para todas y todos los diputados. Es una Legislatura inclusiva y es también una legislatura tolerante.

Por eso y en consonancia, la Cámara de Diputados, le voy a proponer a la Junta de Coordinación Política que se sume a la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el próximo 25 de noviembre. Durante todo noviembre se aprobarán diversas reformas contra la violencia de género. Se hará visibilidad de estos temas en el Canal del Congreso invitando a Inmujeres y algunas Organizaciones no Gubernamentales para conocer las necesidades de las mujeres en estos temas.

Pero, sobre todo, las y los diputados de Morena reafirmamos nuestro compromiso con la eliminación de la violencia en contra de las mujeres.

Como sociedad, como políticos, como representantes populares, como mexicanos, como padres, como nietos, como parte de esta sociedad mexicana tenemos una deuda con las familias de las víctimas de feminicidio que esperan, reitero, justicia. Con esta reforma, la Cámara de Diputados dio un paso para que esto, efectivamente, sea una realidad.

Muy buenas tardes.

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