• Necesario, imponer sanciones más severas a quien atente contra la salud e integridad física de niñas, niños y adolescentes, indicó Steve Esteban del Razo.

El diputado Steve Esteban del Razo Montiel presentó una iniciativa por la que se adiciona la fracción VIII al artículo 196 del Código Penal Federal en materia de suministro de drogas a menores de edad, mediante dulces, bebidas o alimentos diseñados para generar farmacodependencia.

La propuesta tiene como objetivo principal imponer sanciones más severas a todo aquel que atente contra la salud e integridad física de cualquier ciudadano con un énfasis a cuando se haga en contra de los menores al proporcionar a través del engaño sustancias psicoactivas.

En conferencia de prensa, el diputado integrante de la bancada de Morena explicó que el consumo de drogas en México entre niñas, niños y adolescentes es un problema de salud pública que afecta gravemente.

En ese sentido, expuso que el 46% de los estudiantes entre 16 a 24 consume sustancias de abuso con base a los datos y estadísticas de 2023, “cifra que tiende a ir en aumento en este 2024 y si no tomamos la responsabilidad y medidas necesarias para revertir dichas cifras el impacto a la salud será muy alto”.

Del Razo Montiel agregó que muchos casos que se han conocido, y como un padre ve que su hijo oscila entra la vida y la muerte, es algo que obliga a todos los niveles de gobierno a atender este tipo de situaciones, “no solamente desde un enfoque preventivo, sino desde penas más severas para todos los que atenten contra nuestras niñas, niños y adolescentes”.

En ese marco, indicó que esta reforma responde al contexto en que diversas sustancias que con una sola exposición generan dependencia y adicción severa; situación que merma el desarrollo niñas, niños y adolescentes desde el primer consumo.

Detalló que el incremento de las sanciones puede tener un efecto disuasorio y preventivo sobre este delito.

Toda vez que, al aumentar la severidad de las penas, se puede enviar un mensaje claro a la sociedad: “drogar a los menores de edad es un acto inaceptable, intolerable y que merece un castigo ejemplar”.

Por ello, dijo, las penas más severas, además, pueden ayudar a reducir la impunidad, el incentivo y la frecuencia de este delito, así como aumentar la denuncia, la investigación y la persecución de los responsables.

“Es necesario generar conciencia y normativas que incluyan a todos los niveles de gobierno, padres de familia y sociedad civil es necesario, no solo para generar una sensibilización, sino para proteger a nuestras niñas, niños y adolescentes ante los riesgos y consecuencias de consumir sustancias psicoactivas”, concluyó.