DIPUTADA MARÍA MARIVEL SOLÍS BARRERA (MMSB). Muy buenas tardes a todos. Agradezco la amable invitación a este foro de parlamento abierto que organiza la Comisión de Transparencia y Anticorrupción de esta Cámara de Diputados y extiendo un amplio reconocimiento al diputado Oscar Yáñez por impulsar estos ejercicios que nos acercan sobre todo más a los ciudadanos.

Saludos a las diputadas y diputados integrantes de esta Comisión, a todo su gran equipo de trabajo y también saludo a los invitados especiales, a los medios de comunicación.

Debo decirles que desde hace más de tres décadas el mundo ha vivido una transformación digital, soportada por el uso masivo de redes y de dispositivos.

Esa transformación aceleró la competencia, como ustedes muy bien saben, comercial y la búsqueda para que los gobiernos adoptaran tecnologías que les permitiera hacer más eficiente la provisión de servicios públicos.

Durante este tiempo, la orientación de la política industrial de nuestro país no correspondió del todo a las necesidades de la sociedad. Se generó una desconexión entre la industria y el sistema educativo.

Como nación, dejamos de lado la formación de recursos humanos en áreas estratégicas y eso también incidió en la desigualdad.

Esto se dio en parte por la escasez de recursos altamente especializados y por otra parte, la existencia de una planta productiva incapaz de incorporarlos al mercado laboral formal.

La iniciativa que hoy presento plantea la adopción de prácticas en el servicio público que propicien la generación de innovaciones tecnológicas que permita acelerar la creación de desarrollo y consolidación de empresas de base tecnológica de capital nacional.

Además, con esta propuesta, se busca promover las vocaciones para el emprendimiento, una mayor eficiencia pública y, sobre todo, para que nuestro país logre disminuir la alta dependencia tecnológica que tenemos del exterior en muchos ámbitos.

Al respecto, es importante señalar que la pandemia nos ha demostrado que como país tenemos varios temas pendientes para generar una industria propia capaz de responder a desafíos como es el de la salud pública.

Es de destacar en este espacio el gran trabajo que ha desarrollado la directora del Conacyt, mi reconocimiento a la doctora María Elena Álvarez-Buylla. Como ustedes saben ya hizo entrega de los dispositivos, los ventiladores, que ayudará fuertemente a esta pandemia.

Debo destacar que lo que el Conacyt actualmente realiza, son esfuerzos emprendidos a reorientar la administración, la política de ciencia y tecnología en el país, y sobre todo atender los principales problemas nacionales, que como ustedes saben son en temas de salud, medio ambiente, alimentación, retos que tenemos, yo creo, todos.

Y ha implementado una serie de programas estratégicos y proyectos muy específicos que están incidiendo fuertemente en resolver estos grandes problemas nacionales que tenemos.

La iniciativa sobre compras públicas toma como referencia casos de éxito surgidos en países como Holanda, Noruega, Reino Unido, Finlandia, Estados Unidos. Estos países, al incluir esquemas para la adquisición por parte de las instituciones públicas, han logrado generar bienes y servicios novedosos.

Estos esquemas, además de facilitar la implementación de soluciones, estimulan la innovación y la competencia.

Como todos saben, la innovación y la educación, cultura y sobre todo el tema del desarrollo de nuevas tecnologías es lo que permite, de alguna manera, el desarrollo de un país.

Y doy como ejemplo también, y que ustedes lo conocen, a China, que de acuerdo con la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, hacia la década de traslado, la base estructural de su economía hacia las industrias más centradas está basada en el conocimiento.

A este país asiático la innovación le ha valido muchísimo para mantener sus ventajas competitivas, acción que ha promovido su constante crecimiento económico.

Si ustedes recuerdan fue el primer país que de alguna manera presentó la problemática de pandemia, pero también la atacó de inmediato, reunió a científicos, tecnólogos, y dedicó un presupuesto específico para impulsar la investigación en salud.

Estas experiencias, me permiten afirmar que la adopción de esquemas como el de las compras públicas de innovación, generan cambios significativos en los bienes, productos, servicios, procesos y métodos en sus dinámicas de mercado a favor de cualquier necesidad.

Pongo el ejemplo de lo que específicamente sucede en Colombia. Hay un auge de empresas dedicadas a proveer de servicios educativos a través de plataformas digitales en áreas de formación para el trabajo y la cuarta revolución industrial.

Los gobiernos subnacionales colombianos han logrado eficientar procesos de gestión pública, incorporado soluciones para mejorar procesos internos entre los que se encuentra la selección de personal, la gestión de servicios y la programación para la atención médica.

En México, cabe destacar, hay varios ejemplos de empresas que han desarrollado soluciones bajo esquemas de compras públicas.

Por ejemplo, la empresa Grin opera redes urbanas de patines eléctricos que apoyan la movilidad en la Ciudad de México.

También, tenemos el caso de la empresa Sistema.Bio que provee soluciones de biodigestores para la gestión de residuos en algunas ciudades. Esta empresa ha estado trabajando para acompañar los esfuerzos de la Agenda 2030 y que todos ustedes conocen, sobre todo para cumplir objetivos como la reducción de la pobreza, reducir el hambre, el uso de energías alternas y, también lo importante de implementar acciones para mitigar el cambio climático.

Estos son algunos ejemplos de lo que se puede lograr con este instrumento incorporándolo en la actual Ley de Adquisiciones del Sector Público.

Los alcances pueden ser diversos y con el tiempo, estas reformas pueden ayudar para implementar soluciones tecnológicas para atender situaciones como las que hoy vivimos a través de la telemedicina. También se puede aplicar para la gestión del transporte público o incrementar la participación ciudadana.

Las compras públicas impulsan el uso y la inversión en actividades que involucran tecnología, ciencia e innovación.

Las compras públicas de innovación fortalecen el desarrollo a través de la generación, transferencia y aprovechamiento de la investigación científica y el desarrollo tecnológico.

Asimismo, incentiva la inversión privada en el sector de I+D, generando un crecimiento holístico sostenido a nivel nacional.

Es importante destacar que en México la inversión en I+D es escasa: se encuentra por debajo de 0.5 por ciento del Producto Interno Bruto.

De lado contrario, las adquisiciones del sector público rondan entre el 7 y 10 por ciento del Producto Interno Bruto, sin contar la obra pública.

Según el Registro de Instituciones y Empresas de Ciencia y Tecnología, en nuestro país existen 8 mil 747 empresas nacionales que realizan innovación en diversos sectores como el de las tecnologías de la información, agricultura, salud, alimentos, medio ambiente, automotriz, aeroespacial, entre otras.

Sin embargo, debemos reconocer que ese registro no muestra con exactitud las capacidades que tiene el país para el desarrollo de innovaciones y la solución de problemas.

Es importante actualizar y conocer realmente el número de empresas de base tecnológica que tenemos en nuestro país.

Son cientos de empresas nacionales que pueden hacer una incursión exitosa de sus avances e instalaciones tecnológicas, mediante las compras públicas de innovación.

Esas empresas requieren el impulso y la reorientación de los esquemas de adquisición pública.

México debe explorar la asignación de contratos basados en la creación de competencia, lo que permitirá en el mediano plazo incrementar el número de empresas de base tecnológica, eficientar la inversión pública y, como efecto directo, orientar la política de innovación.

La propuesta que presento ante ustedes, busca que la contratación anual de cada entidad, sea de al menos de 5 por ciento del total de sus recursos, priorizando soluciones presentadas por empresas nacionales, instituciones de educación que destacan la gran importancia que tiene el desarrollo tecnológico que desarrollan las instituciones de educación pública y, sobre todo, los centros de investigación.

Debemos cerrar la brecha entre la investigación y la industria, por ello, también esta propuesta dispone la creación de un fondo especial para el financiamiento de compras públicas de innovación, mismas que se harán por medio de toda la normatividad, con los requisitos específicos establecidos por la ley.

Esta reforma plantea el fortalecimiento del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología como el actor clave en la definición de esa política de innovación.

Por último, destaco que los principios son muy claros: buscamos el desempeño del servicio público, buscamos ser más eficientes en el tema de transparencia y propiciar la generación de capacidades de nuestro país.

Reitero de verdad mi agradecimiento a esta Comisión de Transparencia y Anticorrupción en este ejercicio de parlamento abierto.

Muchísimas gracias a todos.

LINK PARA DESCARGAR VIDEO:
https://youtu.be/dZcfhkP8660