DIPUTADA SUSANA BEATRIZ CUAXILOA SERRANO (SBCS): Estimados compañeros diputados y diputadas. Con su venia, señora presidenta. El dictamen que se somete a esta soberanía les da lugar y justicia a las mujeres en la historia de este país, además de armonizarse con nuestra Constitución Política de los Estados Unidos en su artículo 41.

Este dictamen que hoy se presenta incorpora en su contenido el principio de paridad de género al artículo 5 de la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. La propuesta original presentada por nuestra compañera diputada Martha Patricia Ramírez Lucero, enriquecida por la Comisión de Derechos Humanos con el fin de fortalecer la aplicabilidad de la presente reforma y ya que de esta manera sería más incluyente la ley, quedando el primer párrafo de la siguiente manera.

Artículo 5. La Comisión Nacional se integrará con un presidente, una secretaría ejecutiva, visitadores generales, así como el número de visitadores adjuntos y personal profesional técnico y administrativo necesario para la realización de sus funciones, respetando el criterio constitucional de paridad de género.

Es de mencionar que por disposición constitucional debe observarse el criterio a que alude el citado artículo 41, párrafo segundo de la Norma Fundamental.

Es decir, la paridad de género, que su incorporación en la Ley de la Comisión Nacional de Derechos Humanos daría congruencia y armonía a la misma, en relación con el texto constitucional en lo que al mencionado principio corresponde. Al mismo tiempo que sería más incluyente y traería como beneficio la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en todos los puestos o cargos de la CNDH.

Es de mencionar que hablar de paridad de género es aludir a la apertura que se utiliza para garantizar la igualdad entre hombres y mujeres en el acceso a puestos de representación política, es un criterio estipulado en la ley para asegurar la participación igualitaria en la definición de cargos públicos y candidaturas políticas.

La paridad de género en el ámbito público ha encontrado fundamento en nuestro país en la reforma constitucional, llevada a cabo en junio de 2019. A casi 9 años de la más relevante reforma constitucional que México ha llevado en materia de derechos humanos, se han observado los avances realizados en este ámbito. También la distancia que existe entre lo previsto en las normas y su vigencia en la práctica.

La igualdad de género es un principio constitucional que estipula que hombres y mujeres son iguales ante la ley, lo que significa que todas las personas sin distingo alguno tenemos los mismos derechos y deberes frente al Estado y la sociedad en su conjunto.

Sabemos bien que no basta decretar la igualdad en la ley si en la realidad no es un hecho, para que así lo sea, la igualdad debe traducirse en oportunidades reales y efectivas, como: para ir a la escuela, acceder a un trabajo, a servicios de salud, seguridad social, competir por puestos o cargos de representación popular, gozar de libertades para elegir pareja, conformar una familia y participar en los asuntos de nuestras comunidades, organizaciones y partidos políticos.

El reconocimiento de la igualdad de género ha sido una conquista histórica de la mujer. Hace 250 años plantearse la igualdad de derecho era aún inconcebible, ya que se consideraba que las mujeres eran naturalmente diferentes o inferiores a los hombres. Qué equivocados estábamos.

Consiguiendo por sí misma la mujer participar en procesos políticos, contribuye al desarrollo del país, involucrándose en espacios que le permitan participar activamente en donde sea parte de la toma de decisiones y partidaria de los acontecimientos.

La mujer juega un papel muy importante en su participación en la toma de decisiones, desde cargos de elección popular fortalece la democracia y a la sociedad en general. Cada vez es más común que las mujeres ejerzan cargos de elección popular o de alta responsabilidad en el ámbito público y privado.

Por último, el actualizar e incorporar en nuestro ordenamiento jurídico la paridad de género, sin duda traerá grandes beneficios a nuestro país y una justicia social para las mujeres. El presente dictamen tiene como objetivo avanzar en el ámbito de la inclusión social.

Compañeros legisladores, aprendamos de nuestro pasado y de las experiencias que están viviendo otras naciones, tengamos empatía, acabemos ya con la enorme brecha y desigualdad, el machismo que padece nuestro país, esperando poder contar con su apoyo y la modificación del presente dictamen. Muchas gracias. Es cuanto, presidenta.