● Si se ataca el problema en altamar, se reducirá el impacto y las afectaciones económicas, ecológicas y al turismo.

● Es necesario darle un uso de provecho y legislar sobre la propiedad de éste que puede ser un recurso explotable.

El presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados, Luis Javier Alegre Salazar, expresó su respaldo y aplaudió la decisión del Gobierno federal para que la Secretaría de Marina (SEMAR) sea la encargada de atender la problemática que se enfrenta en el Caribe mexicano por la llegada masiva de sargazo.

Además, manifestó la voluntad de sumarse desde el Legislativo al esfuerzo que se llevará a cabo de manera coordinada con las Secretarías de Medio Ambiente, Hacienda, Marina y Turismo, así como los gobiernos de Quintana Roo, municipales y empresarios.

El legislador comentó que la solución debe incluir un componente de atención en altamar, dirigido hacia el sur y con mecanismos de Semar, asimismo se pronunció por encontrar un uso provechoso para las cantidades industriales de sargazo que arriban a costas mexicanas.

Alegre Salazar comentó que se estima que en 2019, Quintana Roo reciba más de un millón de toneladas de sargazo, en todo el litoral, que son 900 km, “de esos, 150 km son los que se ven más afectados por el sargazo. Ese millón de toneladas es un 300 por ciento más de lo que se recibió en 2018, que fueron 250 mil toneladas”.

En ese sentido aseguró que si se atiende el sargazo en altamar podrá reducirse la cantidad y el impacto de lo que llega a las costas, y en consecuencia se reducirían las afectaciones al turismo, ecología y economía.

El diputado del Grupo Parlamentario de Morena explicó que el sargazo crece al doble cada 18 días en aguas cálidas con nutrientes, como las del mar Caribe hacia el sur.

“Si sabemos que el sargazo crece cada 18 días al doble, la lógica nos lleva a que, si nos acercamos 18 días de corriente hacia el sur, estamos atendiendo la mitad del problema; y si nos vamos a otros 18 días hacia el sur en corriente, estamos atendiendo una cuarta parte del problema, y sucesivamente hacia el sur. Conforme nos vamos acercando hacia el sur estamos exponencialmente reduciendo la cantidad de sargazo que nos llega a nuestras costas”, aseguró.

Explicó que una vez que se recoge el sargazo se tiene que disponer de él y hay muchas soluciones que se han propuesto, como la generación de energía eléctrica, la creación de durmientes para los trenes, sandalias, adobe, fertilizante y muchos más usos alternos.

“Yo me estoy inclinando a que, si se trae el sargazo, sea aprovechado para la generación de energía eléctrica, porque nos hace falta complementar en el sur, especialmente lo que es Campeche, Quintana Roo y Yucatán, la producción de energía eléctrica”, planteó.

Comentó que es necesario que desde el Legislativo se implementen políticas públicas que aporten lo fundamental para aprovechar el sargazo, ya que éste puede llegar a ser explotado y convertido en un negocio para quienes producen energía eléctrica y fertilizantes.

“Hoy es un costo, pero puede llegar a ser negocio. Si está dentro de nuestras aguas costeras el dueño es la Secretaría de Medio Ambiente o el Gobierno federal. En aguas internacionales, el dueño es quien lo recoja”, dijo.

Informó que el año pasado se ejercieron, entre Gobierno federal, estatal y municipales, aproximadamente 450 millones de pesos en estrategias que no fueron eficaces para la atención al sargazo.

“El anuncio del Presidente es sumamente importante porque atiende el pronunciamiento que veníamos manejando desde hace seis meses: el sargazo hay que irlo a buscar en altamar para reducir lo que nos llegue a nuestras costas y no lamentar lo que nos llegue”, concluyó.